lunes, julio 31, 2006

Sansón

Sansón era este tipo que era bakán hasta que una tal Dalila le cortó el pelo. Imagino que después de eso se sintió fatal. Ya nunca más fue el cool del barrio. Como Daddi Yanki sin oro colgando del cogote.
Yo me corté el pelo y tengo esa sensión sansónica de haber perdido mi poder. Extraño la rudeza de mis puntas partidas. Es que es raro amarrarse el pelo y ver sólo el vestigio de lo que, en un tiempo no muy lejano, fue una maravillosa cola de caballo.

Generalmente una se corta el pelo después que te patea el pololo. No sé bien por qué, quizás una manera de sentirte atractiva y que el otro se sienta un imbécil. Quizás es una forma de enviar la señal de "mira lo nque te perdiste". El problema es que él lo sabe, por eso te dejó! En fin. Te cortas el pelo y luego qué? A veces queda mal, a veces te sientes peor. A veces ocurre lo que yo llamo el "síndrome de Sansón".

A veces pasa que con el pelo largo pareces de 16, cuando en verdad tienes 20. Entonces vas y te cortas el pelo con la idea de cambiar tu estilo y, de paso, tu miserable vida, pero terminas aparentando 14. Alguna vez fuiste ruda, ya no lo eres. Conténtate con inspirar ternura.

viernes, julio 28, 2006

Él le regaló flores



Cuando ella tenía 14 años, su mamá tenía 28, su papá era alcohólico y tenía 7 hermanos. Cuando él tenía 14, había vuelto de un viaje a Europa con sus padres. Ella a los 14 vivía en Valdivia, leía libros a escondidas por la noche y trepaba el ciruelo del patio trasero para soñar con mejores tiempos. Con buenos tiempos. Cuando él tenía 14 sólo sabía de buenos tiempos, le gustaba su casa de Las Condes. A los 18, ella trabajaba en el Hospital durante el día y estudiaba en la noche. Él se iba a la casa de la playa todos los veranos, le gustaba hacer windsurf con los amigos. Mientras ella buscaba trabajo en una librería, él llegaba a estudiar todos los días a Beauchef. Ella tuvo una hija a los 23, su novio la dejó después de darle dinero para abortar. Él se tituló con honores de Ingeniero, hubo un cócktel en el Salón. Él fue a hacer la práctica a Valdivia, ella lo atendió en la librería. Les gustaba hablar de libros y tomar café. Les gustaba salir de vez en cuando, por las noches. Él le regaló flores, ella le presentó a su hija. Él las invitó a vivir con él...

sábado, julio 15, 2006

la vida es un bailongo


después de terminar por fin con todo. es bueno poder decir que estás de vacaciones y que ya No hay nada que hacer más que vegetar. y en eso soy de las mejores.

tomé mucho café, pero casi ni viajé en metro. no me dieron ganas de escaparme lejos o de tirarme el mapocho, pero creo que le agarraré fobia a los buses. es bueno despertarse en el segundo peaje, no antes, no después. o quizás sí, después un poco.

aprendió algo, usted? aprendí que me gusta heidegger y que se llamaba martín. fíjese usted que nombre más lindo. fíjese que el dasein lo entendí antes de la prueba. el dasein es un ser-para-la-muerte. de eso hablaremos otro día. hoy hace sol y escucho charly.

improduzcamos? vegetemos frente a la tele y comamos papas fritas. es tiempo de engorde!

es tiempo de enamorarse.

miércoles, julio 05, 2006


Llevo 2 semanas sin internet y ya he comenzado a extrañar la globalización. Cuando crees que ya nada puede sorprenderte, descubres que no te conoces tan bien como creías.
Extraño la globalización... las noticias instantáneas, las no-distancias-virtuales y la música ilegalmente gratis.
No es lo mismo alegar contra toda esta globalización y la pérdida de las raíces culturales cuando tienes pc en la pieza e internet a mano. Al menos eso me pasa a mí.
Al final, la pura fachada no más. Me rindo ante el sistema. Aunque a veces diga lo contrario.